Comienzo explicando el fin de semana haciendo una mención especial a una persona muy importante para mí, mi mamá, quien ayer (23 de octubre) cumplió años. Quería agradecerte desde la distancia, todo tu apoyo e ilusión depositado en esta experiencia, que me consta que la estás viviendo muy de cerca. Gracias por animarme, por comprenderme, por escucharme, por todos los consejos dados, las palabras de aliento, por quererme y confiar en mí. Siento no haber estado ese día junto a ti, con papá, Víctor y el resto de la familia. Desde aquí te mando todas mis felicitaciones y mil besos y abrazos para todos, os quiero, y os echo de menos, para que engañarnos, pero estoy muuuuuuuy feliz aquí.
Siguiendo con la rutina de siempre os cuento como ha sido mi fin de semana.
El sábado, tras dormir mucho, porque lo necesitábamos después de toda la semana en el cole, 
dediqué la mañana a hacer la colada, y como no disponemos de lavadora, frota que te frota me tiré un buen rato. Mientras tanto Paula ayudaba a los hermanos a recoger el jardín. Después nos fuimos a comprar algunas cosillas para hacer limpieza a fondo en nuestra humilde morada y regresamos a comer.
Hicimos rápido la mochila y nos pusimos de camino hacia Boukrom, junto con John Kusi, que se ofreció para acercarnos.
Ya allí, junto a nuestros compis españoles, estuvimos hablando un rato acerca de cómo nos había ido la semana. Ellos están muy contentos. Su colegio es de gente más adinerada y los profesores están más formados, por lo que hay bastante diferencia con respecto al nuestro, allí no falta ni un lápiz a los estudiantes y los libros hasta tienen color, pero no cambio Sabin Akrofrom por nada.
Después de esto nos pusimos guapos y nos fuimos de fiestuqui por una zona de Kumasi llamada Bantama (Cenamos antes en un restaurante viendo el partido del Real Madrid, claro).
Por esa zona de fiesta, la música estaba tan sumamente alta que nos teníamos que gritar en la calle para oíros, asi que cambiamos rápido de zona, y nos fuimos a un sitio muy chulo donde había música en directo, al que no tardaremos en volver.
Esa noche pudimos comprobar como a los Obronis nos cobran el doble, el triple o lo que quieran en los bares, taxis,… Menos mal que iba Frederic, un magnífico profe de infantil, del cole de Saint Marist School, que es un sol de persona, siempre sonriendo y dispuesto a todo por nosotros. Mil gracias my friend.
Y se hizo domingo.
Mañana relajadita, desayuno, charloteo y paseíto con las chicas y Hans, un brother, por la zona. Vamos abriendo los ojos cada día más, y descubriendo y afirmando que estamos en el lugar de los grandes contrastes; junto a una gran casa con guardias de seguridad y alambres de espino en los muros, nos encontramos con una chabola, llena de niños desnuditos, rodeados de moscas y 
basura. Es un recuerdo de que estamos en África. Además la gente va construyendo las casas muy poco a poco, cuando ahorra un dinerillo pone 4 ladrillos, cuando consigue ahorrar otro poco pone las ventanas,… por eso vemos tantas obras donde vive la gente, sí habéis leído bien.
A la vuelta reponemos fuerzas y descansamos un poquito para salir de nuevo hacia el “Asantehene palace”, un museo palacio donde se cuenta la historia del rey de la región Ashanti. Allí quedamos con Jay, el norteamericano.
Caminamos durante un ratito por el centro de la ciudad, rodeando el Mercado central.
Está anocheciendo y la gente se apresura a recoger sus puestos, apenas puedes caminar, sin ver, no hay farolas y las que están no lucen, asi que nos cogimos un taxi, de los privados, ya que hay tres tipos de desplazamientos aquí: los tro-tros, que son furgonetas que tienen un recorrido fijado y van cogiendo y dejando a gente, los taxis públicos que van pitando, también con recorrido fijo, pero que van haciendo paradas, por lo que la gente se sube y se baja, y por último los privados, que son los taxis que no pitan, los que recogen a gente y donde tienes que regatear el precio. De este último tipo son los que estamos cogiendo nosotros, ya que para los otros transportes, de momento, es pronto, se necesita un poco de entrenamiento jeje.
Y de vuelta a casa, para preparar la nueva semana que comienza.
Ya es lunes, segunda semana en marcha.
Estoy hoy contentísima, ya que es el primer día que conseguimos seguir completamente el horario, bravoooooooooooooooooo. Mientras a primera hora los niños tenían Francés, yo he 
terminado de colocar el armario, os dejo aquí una foto, ¿A que ha quedado genial?, también he hecho unos dibujos para poner en la puerta de clase, que siempre me confundo, y ya de paso damos un poco de color al cole.
Además los niños han tenido otras tres asignaturas, han corregido los deberes,… vamos que ha sido una mañana muy productiva. ¡Ah! y he vuelto a dar clase de ciencias, pero en 2B, donde esta Paula.
Con los profes vamos poquito a poco, pero con Verla nos llevamos genial (Ayer nos llamó para saber que tal estábamos, es tan maja). Está dispuesta a enseñarnos a cocinar comida típica de aquí, a ir de compras con nosotras (Ya hemos quedado para el viernes), quiere aprender a cocinar comida española, y está más motivada en clase. ¡Ah! Y ya la entiendo mejor yuhuuuuuuuuuuuu.
Hoy hemos llegado tardísimo a casa, hemos hecho limpieza a fondo,y ahora nos toca preparar las clases… asi que nos vemos mañana.
PD: Gracias a Loly y a Mire por vuestras ideas y ayuda. Mil besazos desde aquí.
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