jueves, 24 de noviembre de 2011

National Mole Park

Lo sé, llego un poco tarde, mil perdones a los que estais esperando esta entrada, pero me ha sido imposible conseguir un ratillo para escribirme-os.
Por un lado está el mega viaje del fin de semana, por otro que no hemos tenido internet y que nuestra agenda se va llenando por momentos.
Pero por fín, ya estoy aquí.
Jueves 17 de Noviembre.
El hermano John nos acerca al cole. El día se pasa rápido, ya que las clases finalizan a las 13:00h, justo después de comer, el motivo es que al día siguiente los profesores viajaremos al norte de Ghana, concretamente a Jirapa.
Nos vamos solas en un trotro a casa, haciendo una parada en una tienda. Paula necesita un vestido. Aquí toda la ropa que se vende ya está usada. Para que os hagáis una idea, hemos encontrado camisetas de H&M, de blanco, zapatillas de decathlon,… y aquí no hay ninguna tienda de esas; asi que os imagináis de donde proviene ¿No?
Llegamos a casa, hacemos la maleta y disfrutamos de una divertidísima cena con Bruno, uno de los novicios. Faltaban Francis y John que llegarían más tarde. El resto de hermanos ya estaban en Jirapa.
Viernes 18 de Noviembre.
7:00 a.m y ya se oyen vocecitas en casa. Nos levantamos y desayunamos rodeadas de gente que no conocemos. Llega ya el bus del cole cargado de profesores, cocineros, amigos, familiares,… Todos iremos en un autocar a la celebración de la emisión de los votos perpetuos del hermano Sebastian.
Tras dos horas intentando salir de Kumasi y tras un viaje de 8 horas llegamos a nuestro destino. Cabe resaltar que tan sólo tuvimos dos paradas de 10 minutos para ir “al baño”, una de esas paradas en medio de la carretera, que por cierto, estaban genial, de las mejores que he visto en Ghana.
Al llegar hambrientos (nos alimentamos a base de dos cachitos de pan durante el trayecto) nos tomamos una cervecita tras repartir las habitaciones. Es hora de cenar, los obronis llegamos los últimos y nos ponemos juntos, pero al más puro estilo scout, llega John y empieza a desordenar las mesas cambiando a la gente para que se conozcan, ¡Es genial!.
Toca vueltecita por el pueblo, con paradas como no para tomar un refrigerio. En esta zona el calor, para nosotros, es más soportable, es más parecido al calor veraniego de las tierras de castilla, sin humedad, más seco.
Sábado 19 de Noviembre
Hoy toca disfrazarse. Nos ponemos nuestras mejores galas para asistir a la ceremonia del hermano.
Fue una misa muy bonita y emotiva, pero también muuuuuuuuy larga, 4 horas que duró. Estuvo repleta de canciones, gritos y bailes al más puro estilo africano. A veces nos costó seguirla porque hablaban en Halisa, que es la lengua de allí, y no el Twi, como en la Región Ashanti (Creo que ya os dije que en cada región se habla una lengua).
Al término nos fuimos a comer con los hermanos, un ratito de descanso y partidito de los chicos contra los profes del cole. Toca hora de cenar, otra vueltecita por el pueblo y mañana será otro día.
Domingo 20 de Noviembre
Sigue la celebración. En principio hay misa, pero por falta de organización se cambia la hora. Muchos hermanos procedentes de Costa de marfil, Camerún o Liberia ya se han ido. Nosotros también continuamos nuestro particular viaje. Madame Rosa, esta vez no nos puedo acompañar.
En el mismo Jirapa, cogemos un trotro que nos llevará hasta la capital de la región, Wa. Al llegar allí, un poco desubicados, una señora muy amable nos enseña donde tenemos que comprar los tickets para llegar hasta Damango.
Esperamos allí durante hora y media, reponiendo fuerzas comiendo bananas, pan y agua. Ya en el bus, volvemos a encontrarnos con las carreteras, o más bien caminos del áfrica más pura. Sólo os digo que los trotros no pasan por allí porque están en muy mal estado.
En el camino recogemos a más gente, no cabe todo el mundo en el bus. Asi que para entrar y conseguir un ticket, la ley que rige es la del “más fuerte", hasta el punto de llegar a darse verdaderos empujones y tirar los bolsos por las ventanas del para poder entrar. Fue gracioso, pero un poco agobiante, ya que además volaban bolsas de ñame sobre nuestras cabezas.
Nos quedan unos cuantos kilómetros por llegar. De repente el bus se para en una aldea, Kabampe, son las 17:05h, una rueda se ha estropeado, y queda poco para anochecer.
Lo que iba a ser una espera de una media horita se convierten en 3 horas. Hasta las 20:15h no nos movemos de allí.
En el transcurso de esas tres horas, perdidos en la noche en una aldea en medio de toda áfrica, nos da tiempo a echar una cabezadita, a jugar al fútbol con los pequeños que viven allí, quienes se asustan de las cámaras y quienes no entienden ni una palabra del inglés. Hablamos con gente que iba en el bus, y entre nosotros, para barajar posibles soluciones… Hay dos, esperar más o aceptar un todoterreno que nos ha buscado una señora, el cual nos lleva hasta el hotel por 60 cedis (30 euros), bastante caro.
Decidimos esperar. De repente oigo una vocecita que dice “Madame Mari, madame Mari”. Frontal en la mano y mochila al hombro (Modo campamentil total), me acerco y veo que es una chica con la que estuve hablando en el bus, nos habían preparado la cena, TZ, (Una masa de maíz, parecida al Kenkey) con salsa y carne. Pues sí, lo habían cocinado sólo y exclusivamente para nosotros. Cuanto amor. Sinceramente, a mí se me cayó la lagrimita.
Vemos una luz al fondo, pensamos que es ya la rueda de repuesto que ha llegado, pero es otro Bus, que se dirige hacia el Mole Park y que ha venido sólo para buscarnos a los Obronis (El resto, hombre, mujeres y niños se quedó allí. Y mi pregunta es: ¿qué haces ante algo así? Todavía sigo dandole vueltas....).
Alguien debió de hacer una llamada, porque no nos explicamos cómo se enteraron. El caso es que seguimos con nuestro camino.
Llegamos a la entrada del National Mole Park, pagamos 10 cedis sólo por entrar. El bus nos acerca hasta el hotel (Muy Obroni por cierto), donde pasaremos las dos noches siguientes.
Lunes 21 de Noviembre
Como dicen los chicos: "Estamos a tope". Son las 6:30 a.m. A las 6:50 a.m tenemos que irnos al safari, a unos pasitos del hotel; por lo que tenemos apenas 15 minutos para desayunar. Hay mucha gente, asi que decidimos coger unos plátanos que habíamos comprado el día anterior. Los dejamos en una mesa del bar mientras vamos a comprar unas botellas de agua. Al volver vemos que estaba todo el mundo revolucionado, uno de los monos que campa a sus anchas por el hotel nos había robado nuestras bananas. Asi que sin desayunar nos fuimos al Safari. Lo decidimos hacer andando (Bastante más económico que en jeep, tan sólo 3€, más la propina al guía), y con 2 horas de recorrido.
En él pudimos ver elefantes (Os pongo una fotito), antílopes, babuínos, green monkeys (Otra especie de mono), un montón de warhog , los que nosotros conocemos como pumbas, de la película de "El rey León", que son los cerdos de aquí, también vimos cocodrilos y muchas especies de aves, entre otros animales.
El paseito fue una maravilla, y al ser temprano no pasamos demasiado calor. Además tuvimos suerte, ya que no todos los días se pueden ver a los elefantes, ni tan cerca.
Volvemos al hotel para descansar un poco y comer.
Por la tarde, unos (Dani, Edu y Paula), deciden quedarse en la piscina del hotel. David, Juan y yo, nos vamos hasta Larabanga, un pueblo situado en la entrada del parque, a escasos 5km del hotel. Hasta allí fuimos en una moto por unos cuantos cedis, precio turista total. Dos chicos del pueblo se ofrecen para enseñarnoslo y contarnos un poquito su historia.
Hay una mezquita de adobe, la más antigua de Ghana. Visitamos el cole, donde nos dicen que se hacen improvisadas clases bajo la sombra de los árboles; el motivo, hay demasiados niños para tan poquísimo espacio. Como dato nos dicen que en una clase nos podemos encontrar con 75 niños.
Recorremos las calles del pueblo, visitando las casas, viendo los baobabs, grandes árboles sagrados africanos, seguro que a algunos os suena porque aparecen en "El Pricipito" (Libro que os recomiendo que leais). Nos enseñan donde secan las semillas de okra (Para hacer salsas), los pimientos,... Las ponen encima de los tejados, vemos además improvisadas pizarras en las paredes de las casas, donde se imparten clases particulares. Hacemos el fufú típico de la zona, sólo hecho de casava. Nos
explican por qué en las fachadas de algunas casas hay unos dibujos pintados. Antes, era la forma de llevar la cuenta de los días, servía como calendario, ahora es sólo de adorno, ya que sólo los ancianos saben de su significado.
Nos comentan que suele haber muchos voluntarios en el pueblo. Actualmente hay un proyecto procedente de Canáda para el desarrollo de la mujer en la sociedad. Firmamos en el libro de visitas y damos una pequeña aportanción al proyecto. Finaliza nuestra ruta turística. Está anocheciendo y es hora de volver. Los chicos se van en una moto, yo me monto en una furgoneta con unos obronis que se dirigían al hotel (Era un poco arriesgado ir 4 en una moto como quería el conductor....).
Tras una cena disfrutando de la compañía de María, una danesa que se ha recorrido medio mundo, nos vamos a mimir, nos espera un largo viaje de retorno.
Martes 22 de Noviembre
3:45 a.m. Preparados, listos,... ¡YA! De nuevo en un metro Bus. Nos volvemos. Ahora nos dirijimos a Tamale, la tercera ciudad con más población de Ghana, tras Accra y Kumasi.
Nada como un buen despertar divisando entre las ventanas un precioso amanecer africano, de esos que nunca se olvidan. Os dejo una fotito para daros un poquito de envidia, pero de la sana.
Llegamos por fín a Tamale, preferimos un bus más cómodo, de otra compañía, asi que tenemos que cambiar de estación, por lo que recorremos algunas callejuelas de la ciudad, bastante más pobre que Kumasi.
El bus que cogemos ahora, a las 9:15a.m esta en "mejores condiciones" que los de antes, dotado hasta de aire acondicionado. Pero lo que no sabíamos es que para aprovechar más los viajes meten a gente en el pasillo, por dos o tres cedis menos, y se sientan en incómodos taburetes de plástico, hasta iban dos niños en un mismo taburete.
Una sola paradita y por fin llegamos a Kumasi, a eso de las 15:45 p.m, en plena hora de salida del mercado.
Cogemos un taxi y ya estamos en casita. Es hora de descansar.
Ya es 23 de Noviembre, toca cole, y más clases de ciencias. Los niños estaban ansiosos por volvernos a ver. Qué gran comienzo de semana cargado de abrazos.
Jueves 24 de noviemvbre
Nos pasamos toda la mañana de un lado para otro, post office, casa, colegio, haciendo recados del hermano John por el centro,...
Después de comer en el cole, decidimos acompañar al brother Silvain y al brother John a un funeral del primo de este último, en Ofinso, un pueblecito a una hora de Kumasi.
Aquí los funerales se convierten en una fiesta, donde se bebe, se come y se baila, aunque también se llora. Son muy largos, además de caros (A la familia se le da dinero por asistir, como en las bodas). Los puedes ver cualquier día, pero normalmente se hacen los fines de semana, y pueden durar varios días. Se le da tanta importancia porque es una celebración de la vida de alguien, y como nos contó un profesor en la universidad (Maruri), cuando bebes, debes derrabar un poco al suelo para ofrecerselo a los muertos.
Viernes 25 de Noviembre
Tras ayudar a Verla a poner las notas del trabajo de los alumnos durante el trimestre (Falta el examen final), y dar una clase de ciencias, nos dirigimos a una reunión con el hermano Silvain (el superior que ha vivido durante esta semana en Kwadaso, y que esta valorando la situación de cada comunidad). En esa reunión están presentes todos los profesores, la directora, los hermanos,... Silvain quiere escuchar todas las propuestas, dudas, quejas,...
Se ha hablado acerca del excesivo número de alumnos en las clases, de la falta de material, del mal estado de los buses, del salario,... Nosotras hemos propuesto poner más horas de Educación Física, e implatar horas de música porque hay que utilizar los intrumentos que el colegio dispone, que para eso están. Además hemos dicho que los profesores tienen que estar con los alumnos, nada de desaparecer a comprar, ni a comer.
Después hemos estado viendo la cantidad de materiales que tienen guardados y que no utilizan. Pues sí, nos hemos enterado hoy de la existencia de esos materiales, no nos habían dicho nada. Silvain nos ha dicho que la próxima semana tenemos que organizarlo y hacer un inventariado, para saber qué hay y qué se necesita, además de enseñar a los profesores qué pueden utilizar en las clases y dar algunas ideas. Hay tantas cosas por hacer y tan poco tiempo...
Por la tarde, manos a la obra, nos hemos puesto a hacer una rica macedonia y unas tostaditas de jamon (uuuuuuuuuuuuummmmmmm, spanish food) porque hemos celebrado el cumple de John, que fue ayer, día 24. Para ello hemos tenido la visita de la comunidad de Boukrom, de amigos de john, y de algunos hermanos que viven en el noviciado de Sabin Akrofrom.
Espero poder seguir escribiendo con más frecuencia, como antes. De nuevo os pido disculpas por la demora.
Mil gracias por dedicar un ratito de vuestro tiempo para entender y seguir la Vida en Ghana.