lunes, 5 de diciembre de 2011

Acción, reacción, repercusión

Viernes 2 de Diciembre

Quedo en Adum con Paula, Rosa y David. Tras estar esperándoles una hora, por fin llegan; asi que procedemos a patear un poco la zona (Ya no nos perdemos jaja).

Cuando nos llaman Obroni, sabemos que responder, “Bibini tumtum” que es como se llaman a las personas de color, (Bibini, significa africano, Tumtum, quiere decir negro).

Tras un paseo por el centro nos dirigimos, otra vez, al “cultural center” donde comemos para después coger en Kejetia, un trotro (Es la estación de buses y también donde paran todos los trotros).

Llegamos a nuetro hogar, una duchita y nos vamos a cenar con los brothers a la casa del hermano de John Kusí, quien es sacerdote y es quien dice las misas, oraciones cada mañana en nuestra casa. Disfrutamos de una amena cena intercambiando nuestras impresiones de África y bebiendo vino español. Nos dicen que tenemos que volver a Ghana. No quieren que nos vayamos, tampoco nosotras.

*Os pongo una foto con Francis, uno de los novicios que viven en nuestra comunidad. Para que veais lo bien que nos lo pasamos con ellos.

Este día Paula me da los papeles para votar en las elecciones de España. A buenas horas....

Sábado 3 de Diciembre

4:15 Suena el despertador.

África nunca duerme, y esto lo comprobamos cuando a las 5:00h.,ya montados en la bala de plata, vemos como la gente ya está vendiendo, otros se dirigen a sus trabajos, los trotros estan llenos,... Aquí no hay descanso.

Esta vez ponemos rumbo a Adumase-Krobo, el pueblo del brother Augustin, para celebrar el funeral de su hermana y su madre. Como os dije aquí los funerales, son una auténtica fiesta y duran varios días (llegamos en el segundo). ¡Ah! Se me olvidaba, dan invitaciones para asistir.

Tras 5 horas de viaje, teniendo de regalo otro amanecer africano y divisando nuevas aldeas y alguna ciudad como Somanya, por fin estamos en nuestro destino. Se trata de una aldea de la región del Volta donde Augustin se crió con el resto de sus 7 hermanos.

La misa da comienzo cuando los familiares que portan los féretros los colocan en el centro del lugar de celebración, no es una iglesia. El centro de la aldea, con sillas de plástico que la gente cede de sus casas y toldos para taparse del sol, es la zona habilitada para la ceremonia. Es en inglés, aunque hay un traductor de Krobo, dialecto de la región en la que nos encontramos.

Los familiares tienen una zona concreta para situarse. Se les puede distinguir porque visten de negro y portan algo rojo(un pañuelo por ejemplo), distintivo para que se sepa que son personas muy allegadas al fallecido. El blanco y negro también es símbolo de luto, pero sólo para la región Ashanti (El funeral es en “Eastern Region”, cuya capital es Koforidua). Nosotros vamos de riguroso negro. Os muestro una foto de los trajes típicos que lleva la gente de aquí; aunque en la foto aparezcan Jose Antonio y Queen Rosa, quien ya se han convertido en autenticos ghaneses.

Los hermanos maristas y voluntarios tenemos otra zona, los amigos del trabajo, la gente del pueblo otra. Hay carteles pegados en los árboles que los diferencian. También hacen un álbum de fotos y un reportaje de video para recordar el evento.

Cuando se termina la misa, la gente dedica unas palabras, acompañadas de cantos y gritos africanos a las difuntas. Es algo muy emotivo.

Después los hermanos cogieron los féretros, los montaron en el pick up y en procesión fuimos hasta el cementerio, donde se reza la oración final.

Es hora de comer, apenas tenemos un cuarto de hora.

El calor es Afixiante, Jose Antonio nos repite que bebamos agua. Desde hace ya algunos días un fenómeno natural ha llegado a Ghana. Se le llama el Harmathan. Es un viento estacional que sopla a través del noroeste de África cada año desde noviembre hasta marzo. Es seco y polvoriento, y aunque no sudemos, nos deshidratamos aún más. La bruma de Harmattan, le cuesta millones a las líneas aéreas cada año por vuelos cancelados y desviados de sus destinos finales.

*Harmattan, por cierto, parece provenir de la lengua Twi. Algunas personas han sugerido que podría estar relacionado con la palabra árabe haram , que significa prohibido.

En el camino a Kumasi hacemos una paradita para comprar unos deliciosos mangos, que aunque no sea la época de ellos, están riquísimos. Como veis recorremos aldeas muy pobres, con niños que se conforman con un palo para jugar, es la otra cara de la realidad. Aún así, ellos no pierden la sonrisa.

Llegamos a Kumasi a las 21:00. , una cenita y a dormir.

Domingo 4 de Diciembre

Toca mañana de relax. De conversaciones con los hermanos y de limpieza de casa y de ropa (aunque ya usamos la lavadora).

A las 14:45h. salimos de casa para coger un taxi, nos vamos al Estadio Baba Yara, para ver jugar al Ashante Kotokó, a los guerreros puercoespines.

Se les llama así porque es su escudo figura un puercoespín (Símbolo oficial de la región Ashanti) de aspecto amenazador y el lema Kum apem a, apem beba, podría traducirse como “mata a mil, y vendrán otros mil”.

El estadio (el más grande de ghana) se divide en 4 zonas, distinguidas por colores, Amarilla, roja, verde y blanca, cada una con un precio diferente. Nosotros al no saber muy bien que hacer seguimos al hombrecito que llegó en el Taxi con Edu y David y entramos en la zona roja (3 cedis nos cuesta la entrada). El partido ya había comenzado y entramos en el minuto 30 de la primera parte. En internet ponía que era a las 16:00h. (llegamos a las 15:30h.). Nos dicen que cuando quieren cambian la hora de los partidos sin previo aviso.

Hay un ambiente especial en el estadio. Un grupo se pasó todo el partido tocando los tambores africanos, las trompetas,... (al más puro estilo charanga española). Otros, bailaban al ritmo de la música. Fue divertido. Además ganó el Asante kotokó 1-0.

Como anécdota destacar que éramos, nunca mejor dicho, el blanco de la afición. 4 Obronis en un estadio africano. Cuando procedíamos a cambiarnos de asiento, porque no veíamos muy bien, en una de las escaleras me tropecé y se oyó un "EEEEEEEEEEEEeeeeeeeeeeiiii" procedente de gran parte de la gente que estaba sentada. Menuda vergüenza que pasé.

Son las 22:00h y oímos mi movil. Era Verla, mi profe del cole. Ayer tuvo a su bebé, y como me prometío, me llamó para contarme que Eric ya había nacido, y que estaban los dos bien. Por fin soy tía.

Lunes 5 de Diciembre

Después de hacer los papeleos necesarios en inmigración para obtener la extensión del visado, nos vamos, junto con Eric, un buen amigo ghanés, al central market. Él, nos enseña donde podemos encontrar algunos regalitos que queremos llevar a España.

Sorteando como podemos a la gente, la comida, la ropa,.... y al no encontrar lo que buscamos, ponemos rumbo a la zona de la catedral. Nuestra meta, visitar el lugar donde se refugian las niñas de la calle (Aquí se las conoce como “street girls”). Este lugar está conducido por las “Hijas de la Caridad de Saint Vicent de Paul”. Concretamente por la congregación de Nigeria, ya que en Ghana aún no hay.

Nada más entrar en el edificio, y tras esquivar en la puerta multitud de chanclas, nos topamos con un montón de niñas descansando en el suelo, durmiendo o viendo la tele.

Son niñas que trabajan en la calle de sol a sol. Apenas ganan 20 pesewas por trasportar las mercancías en las enormes palanganas de metal. Al día no consiguen más de 3 ó 4 cedis, es decir 2 euros al día, con los que tienen que alimentarse, alimentar a sus pequeños, mandar dinero a sus casas, pagar su ropa,un sitio donde dormir (En una habitación de 25 m. cuadrados se llegan a juntar hasta 100 niñas con sus hijos pagando un cedi), ,... Díficil ¿no?. Como muchas no lo consiguen, se dedican a la prostitución. Esta es la otra realidad.

El edificio esta habilitado para que ellas se puedan asear, puedan descansar, aprender inglés, matemáticas,... pero no hay mucho sitio. Nos hemos encontrado con varias voluntarias de Noruega, una de ellas estará aquí dos años.

Además, como os comenté en una entrada anterior, otro gran problema, es que las niñas, al proceder del norte, no hablan ni inglés, ni Twi. Por lo que en el centro hay dos o tres personas que conocen el dialecto que hablan las chicas, y que ayudan a las hermanas para que se puedan comunicar con ellas.

Las hermanas reciben aportaciones de varias ONGs, de Inglaterra, Alemania, Noruega,... Con el fin de sufragar los gastos de algunas becas concedidas a niñas para que puedan estudiar, que es su principal objetivo.

La hermana Olivia nos cuenta que están inmersas en un proyecto para la construcción de un nuevo edificio, en Kumasi. Será un centro en el que aprenderán, cocina, peluquería,... Un oficio para que encuentren un trabajo y puedan salir de la calle. Además podrá albergar a 40 chicas con sus hijos y, durante el día, mientras las niñas trabajen, habrá un servicio de guardería.

Sigo creyendo que haciendo poquitas cosas se pueden conseguir grandes avances. Sólo hay que levantarse, hacer, comprometerse, creer, experimentar,...

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